El
mismo puente
desde
el que miran
figuras
difusas y lejanas.
Entre
ellas una sombra
que con un giro de grúa
mira
en mi alma.
Me
estremezco, me alejo,
sin
tener muy claro
el
rumbo.
Un
desierto de lenguas muertas
con
su quijada residente
que
silba a las serpientes.
Un
escupitajo
se
convierte en un oasis
caduco.
Un grasiento
caravasar
en
el horizonte
la
ciudad amurallada
Dos
destinos
un
camino
y
una cita en Samarra
Poema que participó en la edición 100 de Palabras Prestadas.
Imagen de wikipedia .
Bajo la misma licencia que la pagina. Autor Izzedine.
Para saber mas:
Me gusta ese poema, poeta. : )
ResponderEliminargracias :) por las palabras y por inspirar mis letras.
EliminarPrecioso poema. Un placer volver a leerte.
ResponderEliminarBesos
Gracias Ambar un placer volver a leerte por estos lares. Espero que la vida te trate bien. un abrazo.
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